La defensa del CapoBus llega a los juzgados 

Este jueves, la Asociación Hazte Oír acudirá nuevamente ante los tribunales para defender la libertad. Y es que, sin duda alguna, el CapoBus ha pasado de ser un icono anticorrupción a un icono de la libertad. Incluso las dos cosas a la vez. 

La causa judicial en defensa del CapoBus es realmente una causa en defensa de la libertad de expresión frente a los intentos de censura. Cuando se intentó prohibir la circulación del CapoBus por la capital, presuntamente debido a que incomodaba al PSOE de Madrid, Hazte Oír decidió acudir a los juzgados para defender y proteger la libertad y, con ello, proteger a quienes respaldan al CapoBus.​

Inicialmente, ni el propio Almeida auguraba un futuro prometedor a la denuncia de Hazte Oír. Sin embargo, contra todo pronóstico, el director de la Policía Municipal de Madrid ha sido citado a declarar. Es relevante destacar que el CapoBus fue detenido en varias ocasiones, siempre antes de que se presentara la denuncia formal. Tras la presentación de dicha instancia, la persecución cesó. 

El Capobus por fuera del Palacio de Cibeles (Madrid)

El conductor del vehículo fue objeto de reiteradas notificaciones con el mismo boletín y afirmaciones carentes, según Hazte Oír,  de fundamento jurídico sólido. Estas acciones parecían orientadas a satisfacer al Capo y a su famiglia más que a responder a reclamaciones legítimas o legalmente justificables.​ ¿A quién le puede molestar tanto el CapoBus? 

Incluso Ignacio Arsuaga, presidente de Hazte Oír, acompañó al CapoBus frente al Ayuntamiento. Se dudaba de si iban a volver a parar al CapoBus pero aún así, en un día importante, durante la celebración del Pleno en el consistorio municipal, se decidió acudir. ¿Desde cuándo es un peligro explicar lo que está ocurriendo en España? ¿Eso es lo que molesta del CapoBus?¿De dónde vienen las órdenes? Pero todavía hay más, ¿es cierto que el PSOE de Madrid alegaba que el CapoBus cometía un delito de odio?

Ignacio Arsuaga con la Policía Municipal de Madrid en una de las detenciones del Capobus.

No estamos ante un caso judicial más. Es una verdadera defensa de la libertad y todo ello a pesar de tenerlo todo en contra. Es en ese punto en el que debe reforzarse. Por eso el CapoBus no es un bus más, no es una acción más: es un icono de libertad.

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